¿Qué son las creencias limitantes? Mi ejemplo más reciente

Hoy te quiero hablar de las creencias limitantes. Empezaré explicándote en qué consisten y cómo nos afectan en nuestro día a día.

Para acabar, te contaré mi experiencia más reciente con estos pensamientos limitantes… y tan reciente, como que he luchado contra ellos mientras preparaba este artículo.

¿Qué son las creencias limitantes?

Las creencias limitantes son ideas, opiniones o pensamientos negativos que consideramos como ciertos, sin que necesariamente lo sean, y que condicionan nuestra vida.

Se trata de estas creencias que todos tenemos, que aparecen de vez en cuando, normalmente cuando menos nos lo esperamos y menos lo necesitamos, y nos bloquean.

“No sé hablar en público”, “soy incapaz de aprender a conducir”, “mis compañeros son mucho más inteligentes que yo”, “no se me da bien escribir” … de ésta última te hablaré en detalle más adelante 😊.

Poco importa que no se ajusten a la realidad, para nuestra mente son ciertas y, por lo tanto, son reales para nosotros.

Además, se refuerzan con el tiempo…

Creencias limitantes

Nuestro comportamiento se ve totalmente influenciado por estas ideas. Son muy dañinas, ya que nos impiden crecer y desarrollarnos, evitan que nos enfrentarnos a nuevos retos y dificultan nuestra toma de decisiones.

 

Origen de las creencias o pensamientos limitantes

Nuestras creencias proceden del entorno en el que hemos vivido, la experiencia y/o las opiniones de los demás.

Puede ser debido a algo que hayamos intentado hacer alguna vez y, como no nos salió bien, ya decimos que es imposible. Quizás alguien cercano (un familiar, un profesor, un compañero) nos dijo que no valíamos, que no podíamos lograrlo, etc.

“Tanto si crees que puedes como si crees que no puedes, estás en lo cierto”, Henry Ford.

Esta idea se queda grabada en nuestro subconsciente y, ante una situación similar, surge de manera automática. Y nosotros la aceptamos sin cuestionarla, como una verdad absoluta. Quizás hemos cambiado mucho desde aquella situación inicial y tenemos nuevas habilidades, pero nuestra mente se bloquea y nos impide actuar.

Muchas creencias limitantes tienen su origen en la infancia, de ahí la importancia de generar en los más pequeños ideas potenciadoras, que son ideas en positivo que nos impulsan a avanzar y superar dificultades.

 

Ejemplos de creencias limitantes

Hay cientos de creencias. A continuación, voy a darte algunos ejemplos de las creencias limitantes más frecuentes. Seguro que muchos te suenan.

No merezco… ser amado, tener éxito, la atención de los demás, que respeten mis decisiones…

No puedo… aprobar esa oposición, hablar en público, confiar en nadie, trabajar de lo que me gusta, aprender inglés…

No tengo derecho a… ser feliz, expresar mis opiniones o los demás se enfadarán, descansar, quejarme, cometer errores…

No valgo… para estudiar, para cocinar, para la informática, para enseñar, como madre…

Es imposible… ser autónomo y vivir tranquilo, ser rico y buena persona a la vez, que la empresa no se aproveche de mí, que encuentre una pareja que me trate bien…

Soy incapaz de… llevarme bien con esa persona, comer sano, ir al gimnasio, callarme, cambiar de opinión…

Es difícil… encontrar gente afín a mí, aprender a conducir, ser feliz, perdonar…

No es correcto/No está bien… decir palabrotas, cometer errores, pensar primero en uno mismo, decir que no…

En el siguiente vídeo, Jorge Bucay ilustra de manera muy clara lo que es una creencia limitante y cómo nos afecta.

 

¡Cambia tus creencias para cambiar tu destino!

 

Mi experiencia personal

Y ahora, te quiero contar que una de las creencias limitantes que he tenido recientemente es la de no saber escribir.

La consecuencia de esta creencia era que cada vez que me ponía a escribir, me tensaba, y lo que me comentaba internamente, aunque no lo escuchaba, debía de será algo así como “que mal escribes”, “lo estás haciendo fatal”, “así no se hace”, “lo que escribes no tiene ni pies ni cabeza”, “pierdes el hilo constantemente”, “no vas a ser capaz de escribir en español de manera correcta”…

Bueno, como comprenderás, al poco rato de estar escribiendo, me cambiaba el humor y como alguien viniera a preguntar qué tal estaba o qué tal iba con el artículo… te puedes imaginar que el tono de voz con el que contestaba no era el más amistoso 🤬.

Se dice que las creencias se forman entre los 0 y 7 años y es probable que esta creencia me viniera de muy pequeña.

El recuerdo que tengo de todos mis años de colegio, instituto y universidad es que tenía malas notas en Historia, donde hacíamos presentaciones, y en Lengua, donde eran frecuentes las redacciones. En Filosofía, ¡ni te cuento lo mal que lo pasaba cuando tocaba hacer las disertaciones!

Bueno, tal vez por esa razón estudié ciencias, y podría decir gracias a eso, porque me encantó lo que estudié.

Bloqueo por creencias limitantes

Gracias también a mi curiosidad por el desarrollo humano y el bienestar, me doy cuenta de lo que quiero mejorar en mi vida. ¡Y este punto es muy importante porque quiero comunicarme contigo en este blog!

Desde que empecé a estudiar y leer sobre PNL (Programación Neurolingüística), Inteligencia Emocional y Psicología, he rellenado unas cuantas libretas con frases, dibujos, citas, reflexiones.

Entonces, lo de no saber escribir, ¿es verdad?

Técnicamente, la primera respuesta es soy capaz de coger un bolígrafo con la mano y un papel y dejar líneas sobre él. Además, soy capaz de dibujar letras y juntarlas para hacer palabras. Por lo tanto, sé escribir.

Segundo, sé hacer frases y, además, voy a recordarle a mi cerebro que ¡sé hacerlas en varios idiomas!

Una vez que me dije estas cosas, decidí tomar las riendas y aplicar en mí misma una de las técnicas recomendadas para superar este bloqueo.

 

¿Cómo conseguí cambiar una creencia limitante?

Una de las cosas más útil que aprendí en las diferentes formaciones de estos últimos años es que dos creencias contradictorias no pueden convivir.

Los pasos que yo he seguido para intentar cambiar esta creencia de no saber escribir son los siguientes:

1.- Identifiqué la creencia que me limitaba, fui consciente de ella. Fui lo más concreta posible.

2.- Busqué un lugar tranquilo durante unos minutos.

3.- Me relajé, cerré los ojos y pensé en un lugar agradable.

4.- Imaginé que había una pizarra, me acerqué a ella y escribí mi creencia limitante.

5.- Después, la borré y pensé en la nueva creencia potenciadora (contradictoria) que deseaba integrar a partir de ese momento.

6.- La escribí en la pizarra y la dije en voz alta dos veces.

7.- Abrí los ojos y escribí en mi libreta:

“Hoy puedo decir que disfruto escribiendo (acabo de hacerlo escribiendo las líneas anteriores), lo hago bien (las frases se entienden, ¿no? 😊) y las personas que lo leen lo disfrutan” (aquí arriesgo un poco y espero que dejes tu comentario al respecto 😊).

8.- Y durante todo este mes, la recordaré a diario al levantarme hasta que la tenga bien interiorizada.

 

Espero que este artículo te haya entretenido, te haya permitido saber más acerca de las creencias limitantes y, quizás, te haya inspirado para identificar alguna de las tuyas e intentar reemplazarla.

Me encantaría recibir tus comentarios y que compartieras tu opinión.

50 comentarios en «¿Qué son las creencias limitantes? Mi ejemplo más reciente»

  1. Pues si, efectivamente Celine, creo que escribes muy bien. Me gusta mucho leer tus artículos de la web, así que es curioso como nos puede limitar algo que incluso hacemos bien. Muchas gracias por compartir estas técnicas que espero utilizar. Un abrazo, Noemí

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  2. Celine,
    toda mi gratitud por la sensillez y la ayuda de tus palabras , estoy en el camino de cambiar mis creencias limitantes al contar tu historia incestivas a que se puede cambiar y creer en que tenemos el poder de lograr todas esas metas pendientes.
    un beso y un abrazo de alma a alma.

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    • Hola Isabel,
      Me alegra saber que mis palabras y la experiencia que he contado son de ayuda para ti.
      El camino no siempre es fácil, pero con constancia y voluntad es posible cambiar esas creencias limitantes que nos bloquean.
      Mucho ánimo en tu camino.
      Un abrazo

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    • Hola, Magdalena.
      Me alegró muchísimo de haberte ayudado con este artículo; ese es mi objetivo.
      Te agradezco que hayas dejado tu comentario y, sobre todo, las bellas palabras que me has dirigido.
      Un fuerte abrazo.
      Céline

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  3. Muchas gracias por el aprendizaje.
    Estoy en el proceso de crecimiento, y fuiste parte.
    Ahora entiendo mas, y me resultará mas fácil detectar para potenciar.
    Saludos, marce

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    • Nunca dejamos de aprender… y eso es muy hermoso.
      Muchas gracias por tus palabras.
      Te deseo lo mejor.
      Un abrazo,
      Céline

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  4. Hola Céline, me ha perecido un artículo brillante, con mucho contenido de valor. Me imagino que habrás superado tu creencia limitante, a las pruebas me remito. ME ha ayudado bastante leer tu artículo, estaba buscando información al respecto, y la tuya me ha venido genial, justo lo que estaba buscando. Siempre estamos en continuo crecimiento y aprendizaje, ¿verdad?
    Un saludo

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    • Hola Carlos,
      gracias por tu mensaje y me alegro de que te haya servido. Las creencias limitantes se superan aunque a veces intenten volver…Aprendemos cada día a desaprender! Es lo que nos ofrece la vida, a veces agota, pero me encanta!

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  5. Céline, muchas gracias por compartirme tú experiencia, me has enriquecido en identificarme contigo, (iba a empezar a hablar de mí), pero no, quiero regresar contigo a felicitarte por compartir y ejemplificar lo que son las creencias limitantes.

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  6. Soy casi abuela, y recién ahora me entero de cómo marcha la mente…lo juro, sé que la niñez te marca, pero nunca pensé que tanto, lo que es peor, nunca pensé que pudiera cambiar, imagino que con gente cómo tú, que explica con tanta claridad y como sí ésto fuera tan posible, no podemos negarnos a intentarlo.

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    • Buenos días Patricia,
      te agradezco tus palabras por que me hacen sentir útil. Me alegro escuchar que no hay edad para cambiar y espero que tu testimonio ayude a más personas a intentarlo. Estamos en contacto y espero que la última entrada en el blog también te guste. Un abrazo.

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  7. Muchas gracias Celine!
    Cierto es que al final, lo que «crees, creas», nosotros mismos nuestras propias barreras en ocasiones. Lo principal es verlo, trabajarlo y continuar.

    Muchas gracias!

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  8. excelente Céline, es primera vez que leo un artículo tuyo y me pareció genial, es didáctico y super entretenido…. voy a seguir todos tus pasos para sacar de mi los pensamientos limitantes. Muchas gracias.
    saludos.

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    • Buenos días Marie,

      leo tu duda sobre una creencia limitante de una habilidad que aún no tienes.

      La creencia limitante podría ser: Creo que no seré capaz de aprender esta habilidad.
      Te invito a respirar y dejar resonar las siguientes preguntas en ti.
      ¿Qué es lo que me lo impide? ¿Cuál sería el primer paso que puedo dar para acercarme un poquito a esta habilidad?

      ¿Te han ayudado?

      ¡Espero leerte pronto! Un abrazo

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  9. Buenas Noches, lei con gusto tu artículo y me ayudo a entender lo que realmente estoy buscando y como hacer para desbloquearlo. Muchas gracias. Espero leerte más seguido.

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    • Hola Gema,
      Gracias por tu mensaje porque me lleva a leerme de nuevo y reflexionar.
      Lo primero es volver a la definición que pondré a continuación: «Las creencias limitantes son ideas, opiniones o pensamientos negativos que consideramos como ciertos, sin que necesariamente lo sean, y que condicionan nuestra vida.»
      Entonces, según mi punto de vista, «decir palabrotas está mal» es una creencia limitante porque si llegas a hacerlo, te juzgarás bajo el criterio del bien y del mal y provocará una sensación de malestar.
      Puedes expresar a veces palabrotas sin juzgarte (si no tienes esta creencia limitante) o expresar tu malestar con palabras que simplemente respeten las personas que se encuentren cerca de ti, allí también el abanico de palabras que pueden ser «palabrotas» o no según cada uno.
      Espero haber aclarado tu duda.
      Un saludo, Céline

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  10. Excelente artículo, es momento de identificar nuestras creencias limitantes y trabajar en consciencia para remplazarlas por ideas que reconozcan nuestras capacidades, valor y fortaleza.
    Gracias.

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  11. Hola,

    Esta claro que las creencias limitantes son cosas que pensamos sobre nosotros mismo. Si realmente creemos que podemos hacer algo, el resultado suele ser siempre positivo. Lo mismo se aplica si realmente creemos que no podemos cuando los resultados son casi siempre profecías autocumplidas.

    El truco consiste en convencernos sin lugar a dudas de que podemos hacer cualquier cosa que nos propongamos. Los seres humanos somos muy decididos e ingeniosas cuando estámos debidamente motivados. Hay personas que han aprendido a caminar nuevamente después de que los médicos les dijeron que quedarían paralizadas por el resto de su vida. Otros han sobrevivido o escapado de situaciones imposibles porque se negaron a darse por vencidos, etc., etc.

    Nuesta mente controla los resultados y la buena noticia es que nosotros controlamos nuestra mente. Todo lo que necesitamos hacer es elegir lo que deseamos creer sobre nosotros mismos y creerlo. Es más fácil decirlo que hacerlo, pero definitivamente es factible para cualquiera.

    Un saludo,

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  12. ¡Hola!
    Ya sé que hace unos años que está escrito este post, pero aún así quiero dejar mi comentario.
    Una de mis más arraigadas creencias es sobre hacer listenings. Se me da bien aprender idiomas y me encanta el idioma inglés. Un día decidí leer un libro de autoconocimiento escrito en este idioma y desde entonces he perdido la cuenta de cuantos llevo leídos. Ahora estoy con libros de ficción, que son más complicados.
    Bueno, pues leer se me está dando mejor de lo que pensaba. Pero no puedo con los listenings con las películas o con los audios. Ya sé que lo ideal es viajar, pero por diversos motivos no puedo hacerlo. No encuentro el modo de desafiar la creencia de que jamás podré hacer un listening; aunque en un lugar muy, pero que muy, recóndito de mí crea que sí.
    Es una sensación rarisima.
    En fin, eso es todo.
    ¡Saludos!

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    • Buenos días Violeta,
      gracias por compartir tu experiencia con un caso concreto. Te invitaría a buscar acciones concretas que te podrían ayudar a superar esta creencia limitante, a tu ritmo. También aprendí idiomas y reconozco que para mí, tirarme a la piscina es la manera más rápida pero no la única. Hoy en día existen muchos videos con opciones de subtítulos en ingles y de velocidad del video. Elije (al igual que para los libros) los temas que te despiertan interés y motivación, busca al principio la velocidad adecuada y los subtítulos y acepta que no entenderás todo la primera vez, ni la segunda, ni la tercera. También tienes la opción de verlos varias veces y después de varias escuchas, es probable que notes mejoría. Esto da ánimos para seguir. Elije el tamaño del escalón y poco a poco acabarás subiendo la escalera entera. Ánimo y espero leerte pronto. Un abrazo

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  13. Hola! Una consulta: hay una superposición real de la «creencia limitante» por la otra? Se resuelve mediante ese ejercicio o debe ser sostenido y repetido? Gracias!

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    • Hola Juan, efectivamente, una vez definida la creencia nueva que es incompatible con la antigua, hace falta ejercitarla durante unos 21 días mínimo (según estudios realizados) con el fin de mantenerla en el tiempo de manera definitiva y reforzarla de vez en cuando si hiciera falta. Allí cada caso es único. ¡Hasta pronto!

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  14. Me parece excelente que seas consciente de tus creencias limitantes y desees cambiarlas para crecer. Sin embargo, sí noto algunos errores en tu redacción que debes mejorar.

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    • Buenos días,
      gracias por tu comentario. Se aprende haciendo y escuchando los retornos exteriores e interiores. Será un placer leerte por privado, si te apetece enviarme los puntos que te parecen oportunos. Prefiero querer o elegir mejorar que deber hacerlo y el cómo y cuándo depende de muchos factores. Saludos.

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  15. Ahora tendríamos que cuestionar hasta que punto no roza con la moral el deshacernos de ciertas creencias. Por ejemplo: si tengo la creencia «tener relaciones sexuales en lugares públicos son malas e inmorales», algun dia por cosas del destino, sucedió y sobrevino una sensación de malestar y culpa.
    Lo que me limita, lo que me encorceta en este caso seria la una creencia basado en la moral. Entonces no todas las creencias limitantes hay que desinhibirlas, otras sirven para protegernos, etc.
    A mi parecer, se deben atacar las principales creencias que nos impiden crecer, no soy partidario de acabar con todas, suficiente con el 80% de las mas importantes, no somos perfectos ni lo seremos, no hay personalidad perfecta.
    Saludos 😉

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    • Buenos días Daniel,
      muchas gracias por la reflexión y estoy de acuerdo en que no es necesario deshacer todas las creencias que tenemos. Sí, es interesante saber por qué hacemos ciertas cosas, corroborar si estamos de acuerdo con ese porqué y actuar en consecuencia cuidándonos.
      Un saludo.

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  16. Hola Celine he leído tu trabajo y realmente estoy contenta de haberlo echo! Se que tengo una limitante pero también se ya que puedo superarlo mil bendiciones para ti!!!

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